
Si estás leyendo esto, es probable que ya hayas recibido tu dispensador de cerveza y estés listo para ensamblarlo. Esta guía te será de gran utilidad para lograr tu objetivo.
Lo primero que debes hacer es sacar el dispensador de la caja. Para ello, retira el fleje con unas tijeras o una navaja, teniendo mucho cuidado. Ten en cuenta que este equipo está montado sobre un pequeño palet, por lo que es importante identificar los accesorios que sujetan el dispensador al palet.
Utiliza un destornillador para quitar los tornillos, uno por uno, hasta deshacerte de todos. Una vez que hayas retirado todos los tornillos, solicita la ayuda de otra persona para levantar el dispensador de cerveza y bajarlo del palet. Este proceso debe realizarse con precaución para evitar dañar el equipo por la parte inferior.
Como te habrás dado cuenta, el equipo está montado sobre cuatro ruedas. Verifica que todas estén bien fijas; si es necesario, apriétalas para asegurarlas. Dos de ellas cuentan con frenos, así que asegúrate de que no estén activados para facilitar el movimiento. Si requieres activar los frenos para que permanezcan fijas, puedes hacerlo.
Durante el ensamblaje, se recomienda mantener los frenos de las llantas activados.
Para abrir la puerta del equipo, hay un seguro en la parte inferior izquierda que debes retirar con un destornillador. Esto permitirá que la puerta se abra libremente. Una vez hecho esto, revisa el interior del equipo; encontrarás una caja grande que contiene todo el kit de dispensado.
Esta guía está diseñada para un equipo de cuatro servicios. Si bien los principios que aquí se presentan te ayudarán en cualquier ensamblaje, es importante considerar que el contenido puede variar. Sin embargo, la mayoría de los dispensadores de cerveza CBB se ensamblan de manera similar, por lo que esta información también será útil para dispensadores de uno o tres servicios, aunque algunos accesorios pueden diferir.
Al abrir la caja, lo primero que debes hacer es identificar todas las piezas que incluye el dispensador de cerveza. Revisa cuidadosamente el contenido y organiza las piezas de manera que puedas visualizarlas con claridad. En resumen, encontrarás una caja con torres, grifos, tornillos y una herramienta para el ensamblaje; cuatro cajas con acopladores tipo "D" con su válvula de no retorno; una caja con un regulador de CO2 y una herramienta de montaje; un manual de uso; y un tornillo para montar el regulador.
Además, encontrarás dos bolsitas con empaques, que son repuestos para grifos y acopladores; guárdalos en un lugar seguro, ya que podrías necesitarlos en el futuro.
En el lado izquierdo del equipo (vista frontal), notarás que el distribuidor de CO2 ya está premontado. Este cuenta con las mangueras instaladas, que son de color rojo. En la parte posterior del equipo, observarás una manguera de CO2 de aproximadamente 1.2 metros de largo, asegurada con un cincho. Dentro del equipo, cada distribuidor ya tiene montada su manguera, la cual está equipada con su tuerca hexagonal y su colilla. Más adelante, abordaremos la instalación de estos componentes.


Examinemos el contenido de la caja que incluye la torre. Esta se encuentra dentro de una caja que contiene empaque, tornillos, tuercas y arandelas de presión. Cada línea cuenta con su respectiva tuerca y, además, encontrarás una llave diseñada específicamente para ajustar los grifos. Es importante tener en cuenta que los grifos no vienen montados, por lo que deberás instalarlos individualmente, al igual que el mango negro. Asegúrate de que cada grifo incluya el empaque mostrado en la imagen; este debe encajar perfectamente para prevenir fugas. La llave proporcionada te será útil para apretar cada grifo.
Ahora, procede a sacar todas las piezas de la torre e identifica cada una de ellas, ya que serán las primeras en montarse. Debes asegurarte de que la torre cuente con cuatro grifos tipo americano y verificar que los empaques negros estén instalados en la parte posterior, tal como se muestra en la imagen. Además, necesitarás cuatro tornillos largos, junto con sus respectivas tuercas y arandelas de presión, así como la llave y el empaque negro que se coloca en la torre, como se indica en la imagen.
Por último, revisa los empaques negros pequeños, los cuales se colocarán más adelante en el acoplador tipo "D".
Para ensamblar la torre es muy sencillo, en el punto anterior ya identificaste todas las piezas ahora, colócala sobre el equipo, asegurándote de que esté alineada con los orificios del dispensador de cerveza. Asegúrate de incluir un empaque negro que debe ser colocado antes de fijar cada tornillo.
Ajusta cada tornillo de manera firme para garantizar la estabilidad de la instalación. En la parte inferior, coloca la tuerca y la arandela de presión, lo cual ayudará a prevenir que se afloje con el tiempo. Es fundamental asegurarte de que los cuatro tornillos estén bien sujetos antes de continuar con el procedimiento, tómate el tiempo necesario para hacer este procedimiento con tranquilidad.
Antes de concluir, asegúrate de que las mangueras estén correctamente alineadas e identifica cada una con una marca del primero al cuarto. Esto facilitará su identificación al momento de montar la línea de CO2. Por último, observarás una manguera anillada dentro del equipo; esta debe ser colocada dentro de la torre y se encargará de transportar el aire frío hasta los grifos.


Antes de la instalación de cada grifo, verifica que la parte superior esté bien ajustada (como se muestra en la imagen). Esto se puede lograr apretándola manualmente para asegurarte de que el ensamblaje sea correcto. Ten en cuenta que los movimientos pueden desajustar los grifos, pero el proceso es sencillo: simplemente apriétalos y estarán listos para usar, ahora para instalar los grifos es fundamental prestar atención a las pequeñas hendiduras que deben encajar perfectamente para garantizar un ajuste adecuado. Los empaques, ilustrados en la imagen anterior, son esenciales para prevenir fugas de cerveza; sin ellos, el grifo puede presentar filtraciones en la parte posterior y gotear.
Ahora procederemos a instalar cada grifo. Primero, revisa que cada grifo cuente con el empaque que se muestra en la imagen. A continuación, colócalos y alinea de manera que se puedan apretar con facilidad. Utiliza la llave incluida en la caja para facilitar esta tarea. En la base del grifo, encontrarás un pequeño aro con orificios que te ayudarán a fijar la herramienta y permitir su giro. Repite este procedimiento con cada uno de los grifos.
Al finalizar, coloca los mangos de color negro y verifica que los grifos abran y cierren sin dificultad. Recuerda que la posición de apertura se logra al mover la palanca hacia afuera, mientras que al moverla hacia atrás se alcanza la posición de cierre. Por lo tanto, asegúrate de dejarlos en posición cerrada.
Al colocar los mangos, asegúrate de enroscarlos correctamente. Un mal enroscado puede dañar la rosca y provocar una alineación inadecuada; Instala los cuatro grifos y los cuatro mangos. Una vez finalizada la instalación, verifica que los cuatro grifos tengan el mango orientado hacia atrás, como se muestra en la imagen; esto indica que están en posición cerrada. Si el mango negro está hacia adelante, significa que está en posición abierta. Si todo está en orden, podemos proceder al siguiente paso.
Dentro del dispensador de cerveza, encontrarás cuatro cajas, cada una conteniendo un acoplador tipo "D", salvo que hayas solicitado un tipo diferente. Retira cada acoplador de su caja para que sean visibles. Cada uno está equipado con una válvula blanca, que actúa como válvula de no retorno; asegúrate de que todos cuenten con esta característica (dispondrás de una pieza de repuesto en una bolsa separada). En la parte superior del acoplador, localizarás la línea de bebida, la cual debe estar equipada con un empaque negro o rojo. La llave incluida facilitará el ajuste de las tuercas hexagonales. En el lado opuesto del acoplador, encontrarás la entrada de CO2, junto a la cual se ubica una válvula de seguridad diseñada para liberar el exceso de CO2 del barril, la cual cuenta con un pequeño aro de acero para facilitar su operación.
Dentro del equipo, podrás verificar que el distribuidor está premontado con las mangueras rojas. Cada línea presenta una tuerca colilla, por lo que es importante confirmar que el distribuidor tenga cada línea en posición cerrada, es decir, en forma horizontal respecto a la línea de cerveza. Si alguna línea no está cerrada, asegúrate de cerrarlas todas antes de continuar con el procedimiento.
A continuación, tome una línea de gas y conéctela al acoplador, asegurándose de que la válvula de no retorno esté correctamente instalada. En la parte superior del acoplador, coloque la manguera proveniente de la torre, asegurándose de insertar el empaque negro o rojo entre la tuerca y el acoplador. Este procedimiento debe repetirse para cada línea; es fundamental ubicar y conectar cada una en el orden adecuado para facilitar el uso en la operación del sistema.
Una vez completado este proceso, asegúrese de dejar cada acoplador con la palanca hacia arriba, lo que indica que el acoplador está cerrado y que no pasará CO2 a través de él. Verifique que cada línea esté bien ajustada para evitar fugas en el futuro.


Dentro de la primera revisión, encontrarás la caja roja que contiene un regulador de CO2 para cerveza, identificada con la marca "The Best Dispensing". Al abrir la caja, descubrirás un manual; guárdalo para futuras referencias. También encontrarás una llave y un tornillo. Además, un empaque adicional blanco estará asegurado con un cincho; retíralo y consérvalo en un lugar seguro.
Para comenzar el montaje, coloca el tornillo con solo tres vueltas, ya que por el momento solo es necesario montarlo sin apretarlo. En el interior de la tuerca hexagonal, hay otro empaque blanco. Asegúrate de que este empaque esté correctamente instalado, ya que es fundamental para evitar fugas.
La llave debe situarse entre la tuerca hexagonal y el regulador, tal como se ilustra en la imagen. Esto facilitará un montaje rápido en el tanque de CO2. Una vez que verifiques que el empaque blanco está presente, procede a instalarlo en el tanque de CO2, girándolo hasta que quede firmemente ajustado, utilizando la llave como ayuda. Asegúrate de orientar los manómetros de manera que sean fácilmente visibles. Después de apretar firmemente, verifica que la válvula de paso del tanque de CO2 esté cerrada, alineada horizontalmente con la línea de gas.
En la parte posterior del equipo, observarás una manguera roja. Debes romper el cincho utilizando una pinza y desenrollar la manguera, la cual debe conectarse a la salida del regulador, tal como se muestra en la imagen. Utiliza una pinza de apretón para fijar firmemente la abrazadera incluida, antes de instalar la manguera, asegúrate de meter la abrazadera, luego introduzca hasta el tope, ajústala con la pinza de apretón y listo debe de quedar bien firme y la abrazadera ajustada para evitar fugas.
Dentro del dispensador de cerveza, verifica el distribuidor: todas las líneas deben estar cerradas y los acopladores deben estar en posición vertical, con la manija hacia arriba (posición cerrada).
Ahora procederemos a revisar la línea de CO2. Abre el tanque de CO2 con media vuelta. Observarás que los manómetros comienzan a moverse: el manómetro de la izquierda comenzará a medir el contenido del tanque de CO2, mientras que el manómetro superior no debería mostrar ninguna lectura hasta que ajustes el tornillo central. Si realizas un ajuste excesivo (varias vueltas hacia adentro), es posible que ya se registre alguna presión. Ten en cuenta que si el ajuste supera los 41 PSI, podría producirse una fuga, dado que el punto de fuga está calibrado a 41 PSI. El regulador funcionará adecuadamente siempre que no excedas la presión de trabajo. Si esto ocurre, no te preocupes; simplemente desajusta el regulador y observarás cómo disminuye la presión.
Ajusta el tornillo central hasta alcanzar una presión de 8 psi; podrás observar cómo el manómetro central incrementa gradualmente (ver imagen con flecha roja). En este punto, es aconsejable verificar la posible existencia de fugas en la conexión entre el regulador y el tanque de CO2. Para ello, utiliza una solución de agua y jabón. Aplica espuma en la conexión del regulador y el tanque de CO2 (ver imagen con flecha amarilla) para comprobar si se forman burbujas. Si no se detectan fugas, procede a abrir la válvula de paso del regulador en la posición de las 6 en punto (ver imagen con flecha verde) y revisa nuevamente las conexiones de la manguera con espuma (ver imagen con flecha azul), así como cada una de las uniones del distribuidor (ver imagen con flecha blanca) donde hay una abrazadera. En caso de identificar alguna fuga, simplemente ajusta ligeramente la abrazadera correspondiente y estará listo.
Si todo está en orden, procede a abrir las válvulas de paso del distribuidor y repite este procedimiento con las conexiones en cada acoplador (ver imagen con flecha gris). En caso de que se presente alguna fuga, ajusta ligeramente la abrazadera. Si la fuga se encuentra en la tuerca hexagonal y el acoplador, verifica que las válvulas de retención estén correctamente instaladas y asegúrate de apretar adecuadamente cada línea. Una vez que hayas confirmado que todo está en orden, cierra la válvula de paso del regulador.


Si hemos llegado a este punto, significa que todo ha salido bien. Ahora, conecte el dispensador de cerveza a una toma de corriente eléctrica dedicada, el equipo incluye un cable de aproximadamente 2.4 metros de largo con un enchufe NEMA 5-15P. Es crucial evitar el uso de extensiones o conexiones compartidas. Asegúrese de que el suministro eléctrico sea el adecuado para el funcionamiento correcto del equipo; de lo contrario, podría dañarse o no enfriar adecuadamente.
El equipo ya se encuentra programado, por lo que es fundamental evitar ajustar el termostato, ya que esto podría alterarlo. El dispositivo funcionará de manera eficiente, alcanzando una temperatura de 0ºC. En este momento, se apagará y se encenderá nuevamente al llegar a 4 ºC, reiniciando así el ciclo hasta volver a alcanzar 0ºC. Por lo tanto, si revisa el equipo cada 3 o 4 horas y observa que está a 4ºC, esto no indica que no esté funcionando; simplemente está completando su ciclo operativo.
Al tratarse de un dispensador de cerveza de conservación, su objetivo principal es mantener la cerveza a una temperatura adecuada que garantice la calidad del producto y un servicio óptimo. Dado que se trata de una bebida no pasteurizada, muy seguramente el fabricante recomienda su conservación en refrigeración. Se sugiere colocar los cuatro barriles de cerveza y permitir un tiempo de enfriamiento de al menos 18 horas; no obstante, esto dependerá de la temperatura a la que se introduzca el barril. Como referencia, se recomienda un período de enfriamiento de entre 18 y 24 horas. Es fundamental que el dispensador de cerveza opere de manera continua; se debe evitar su apagado durante la noche y prevenir interrupciones para garantizar un funcionamiento eficiente del equipo. El funcionamiento del dispensador es relativamente simple: el enfriamiento se lleva a cabo mediante un sistema de tiro forzado que recircula aire frío por todo el gabinete, enfriando gradualmente los barriles de cerveza. Por lo tanto, se aconseja mantener la puerta cerrada para maximizar la eficiencia del enfriamiento. Abrir el dispensador con frecuencia puede impedir que la cerveza se enfríe adecuadamente y resultar en la formación de espuma durante el servicio. Se recomienda mantener la llave cerrada para evitar accesos innecesarios.
Una vez transcurrido el tiempo y con las líneas de CO2 cerradas, tal como se indicó en el punto anterior, procede a acoplar cada barril según lo ilustrado en la imagen. Recuerda que los dispensadores de cerveza están equipados con un acoplador tipo “D”; si intentas conectar un tipo “S” en un barril tipo “D”, no se dispensará cerveza. Por lo tanto, es fundamental prestar atención a este pequeño, pero importante, detalle. Te sugiero que revises los diferentes tipos de acopladores.
Antes de acoplar el barril, asegúrate de que los grifos estén cerrados, es decir, que la palanca esté completamente en la posición de retroceso. Aunque hemos realizado esta verificación previamente, es prudente confirmarlo antes de iniciar el procedimiento.
Primero, coloca el acoplador en la parte superior del barril y gíralo completamente hasta que se detenga; si no lo haces correctamente, el barril podría presentar fugas. Luego, tira de la palanca hacia afuera y hacia abajo, y posteriormente suéltala; escucharás un clic, lo que indica que el barril está correctamente acoplado. Durante este proceso, podrás observar cómo la línea se carga con cerveza, y es posible que notes un ligero aumento en la presión.
A continuación, se procederá a despresurizar el barril para obtener una lectura precisa. El acoplador está equipado con un anillo que debe ser tirado para liberar el CO2 del barril. Tira de él hacia afuera y mantén esta posición hasta que dejes de escuchar la salida del gas. Repite este procedimiento con todos los barriles que planees conectar. Si todo se ha realizado correctamente, estarás listo para dispensar tu primer vaso de cerveza.


Antes de servir tu primer vaso de cerveza, asegúrate de que el regulador de CO2 que instalaste esté ajustado a 8 PSI. En la etapa anterior, ya realizamos este ajuste, por lo que solo necesitas verificar la presión. Si no está en 8 PSI, ajústalo lentamente con un destornillador hasta alcanzar la presión correcta. Si superas los 8 PSI, gira el tornillo en sentido contrario a las agujas del reloj y reinicia el sistema, tirando de la válvula de presión en la parte superior. Repite este procedimiento hasta estabilizarte en 8 PSI.
Una vez que todo esté en orden, abre la línea de paso del regulador de CO2 para permitir el flujo del gas hacia el distribuidor. Luego, revisa cada línea y ábrelas según sea necesario, asegurándote de que el grifo de la torre esté cerrado, con el mango orientado hacia atrás. Una vez confirmado, abre la línea del distribuidor de CO2 para permitir que el gas fluya hacia el barril. Espera dos minutos para que el CO2 se estabilice. Con este procedimiento, deberías tener la presión correcta en el barril.
A continuación, procederemos a cargar completamente la línea de cerveza. Para ello, toma un vaso limpio y acciona la palanca hacia adelante, contando hasta tres. Este paso es fundamental para garantizar una carga de cerveza adecuada de la línea. Luego, coloca otro vaso limpio en la posición indicada en la imagen. Abre el grifo completamente para permitir un flujo de cerveza sin obstrucciones. A medida que el vaso se llena, inclínalo ligeramente para facilitar la ruptura y disipación de las burbujas. Cierra el grifo al alcanzar tres cuartos de la capacidad del vaso, al accionar la palanca hacia atrás; esto te ayudará a obtener una cabeza de espuma óptima.
Repite este procedimiento para asegurar un servicio óptimo, recordando que una buena espuma está directamente relacionada con la limpieza del vaso y la correcta incorporación de la cerveza. Siempre utiliza un vaso limpio para garantizar una adecuada formación de la espuma. Observa el flujo de la cerveza; si es escaso, puedes aumentar la presión a 9 PSI y ajustarla en incrementos de 1 PSI hasta lograr el flujo deseado.